Una opción de venta para agricultores de la zona
A futuro se espera que toda la demanda de alimentos en las instituciones de la zona sea abastecida en su totalidad por productos locales.
IBARRA. Con la finalidad de impulsar a los productores locales a través de la oferta de sus productos, el Instituto de Provisión de Alimentos (Proalimentos), lleva adelante una rueda de negocios y ferias inclusivas, mecanismos que servirán para la compra y contratación de alimentos.
“El objetivo de mantener una institución encargada de la compra de alimentos y contratación de servicios de alimentación es generar procesos inclusivos que permitan el desarrollo de grandes, medianos y pequeños productores, y para descentralizar los procesos de compra y dar la oportunidad a que los productos locales sean los que predominen en estos procesos”, informó Marcelo Albuja, de proalimentos zona 1.
Por esta razón, desde hace un año, Proalimentos -institución adscrita al Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap)-, trabaja en todo el país con la meta de proveer alimentos a diferentes instituciones que requieren de servicio de alimentación, como el Ministerio de Educación, el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), que asisten a escuelas, centros infantiles, hospitales y centros de rehabilitación social.
Para ello, según Albuja, las compras de los productos se hacen a través de diferentes mecanismos, como la rueda de negocios que actualmente fue reformulada, enfocándose en el proyecto de alimentación escolar, en la que se determinó que la fruta sea incluida. En este caso dentro de Ibarra se ha analizado varias ofertas, dando como resultado la mandarina en Pimampiro y la granadilla en Íntag.
Pero para llegar a este resultado se contempla reuniones previas para socializar la demanda de productos por parte de los prestadores del servicio y la oferta de alimentos de los productores locales. Otro de los mecanismos es la feria inclusiva.
“Esta se enfoca en más variedad de productos para la cual se continúa con el proceso de adjudicación de productores de frutas, hortalizas, tubérculos y cereales, entre otros productos. Además es un espacio que pretende dar privilegios a los pequeños productores, para que se negocie a un precio justo”, según manifestó el funcionario.
El instituto determina que el 30 % de productos que usen los diferentes grupos de servicio de alimentación deben ser de productores locales, generando de esta manera mayor inclusión.
“Se busca que la compra pública sea más local, descentralizada e incluyente”, agregó.
Las escuelas del milenio son las principales instituciones en las que se enfoca Proaliementos, ya que en estas se da el servicio de almuerzos escolares, donde existe un promedio de 500 almuerzos diarios. A futuro se espera que toda la demanda de alimentos en las instituciones de la zona sea abastecida en su totalidad por productos locales, tanto para la producción como para el servicio. (VCV/La Nación)