Tratamiento de la violencia de género en los medios de Ecuador merece atención: expertos
Los medios de comunicación en ocasiones banalizan los hechos de violencia contra la mujer, es por ello que se requiere una lectura crítica de medios y un tratamiento informativo que profundice los hechos y plantee la prevención, concidieron en entrevista con Andes dos expertos ecuatorianos.
Quito. El asesinato de Karina del Pozo en 2013 conmocionó a la sociedad ecuatoriana. Murió con solo 20 años de edad tras haber sido violentada sexualmente y asesinada en Llano Chico, al norte de Quito.
Por ese hecho tres personas fueron condenadas a 25 años de prisión por el delito de homicidio, cuando todavía no se tipificaba el feminicidio en Ecuador. Su historia fue reportada por los medios de comunicación, en algunos casos con prejuicios en el tratamiento informativo.
Otro de los casos de violencia de género que han sido tratados con fuerza en los medios de comunicación del país, fue el crimen de dos turistas argentinas en Montañita (localidad ubicada en la Costa ecuatoriana), Marina Menegazo y María José Coni, quienes según la Fiscalía fueron drogadas antes de ser asesinadas. Sus victimariosa fueron condenados a 40 años de cárcel.
Los jóvenes fueron cuestionadas con el argumento de que “viajaban solas, y buscaban problemas” y la prensa reprodujo El tratamiento mediático, sin embargo, recibió duras críticas.
El Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información (Cordicom) emitió exhortos a los medios de comunicación para que evitaran la utilización sexista y discriminatoria de la mujer, y en 2013 detectaron la existencia de contenidos sexistas contra las mujeres de forma permanente en varios periódicos impresos.
Estos contenidos, según señalaba el exhorto, “refuerzan el estereotipo de la mujer como objeto de consumo sexual, erosionando su condición de sujeto de derechos, y situándola en un espacio de inferioridad y desventaja, frente al género masculino y la sociedad”.
El Cordicom cuestionó en ese momento el tratamiento de las noticias de crónica roja, relacionados con caso de violencia de género, cuando se privilegiaba tratar casos escandalosos y sangrientos sin profundizar las causas o el contexto socio histórico del hecho, y recordó que el artículo 62 de la Ley Orgánica de Comunicación prohíbe la difusión de contenidos discriminatorios.
Hernán Reyes, docente universitario y ex integrante del Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información (Cordicom) señaló en entrevista con Andes que los medios de comunicación deben entender que su rol debe ser aportar con información y con contenidos con opiniones fundamentadas sobre temas de interés y enriquecer el debate de problemas de la sociedad y sus soluciones.
Criticó los tratamientos mediáticos sensacionalistas que se han registrado en ocasiones por parte de medios de comunicación en la cobertura de hechos violentos contra las mujeres.
“La forma más grave de discriminar y estigmatizar a las mujeres, es precisamente, invirtiendo la causalidad y la culpabilidad en los casos de agresiones de cualquier tipo que se ejerza sobre ellas, el peor papel que puede hacer un medio de comunicación es invertir el rol, convertir a la víctima en culpable de su propia desgracia”, puntualizó.
Según Reyes, los estereotipos de los mismos periodistas les impiden comprender la realidad y repiten en sus reportajes, los mismos patrones de carácter patriarcal y de estigmatización de las mujeres, aun cuando hayan existido muertes de por medio con mucho sufrimiento de las mujeres.
Propuso que tomando en cuenta estos argumentos es preciso volver al espíritu de la Ley de Comunicación, en la cual está totalmente prohibida toda forma de contenido discriminatorio o violento, y consecuentemente, “retirar de forma definitiva, los contenidos y los mensajes sexistas, machistas o misóginos que permiten que perdure la cultura machista en Ecuador”.
El catedrático indicó que en los medios de comunicación se requiere de autocrítica para mejorar los contenidos y la calidad del periodismo en el Ecuador.
Por su parte, la docente en Comunicación de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) Palmira Chavero expuso a esta agencia que en ocasiones hay banalización de los hechos de violencia contra las mujeres desde los medios de comunicación y se reduce la gravedad de esos hechos, lo cual impacta en la sociedad.
Recordó el caso del atleta parolímpico Oscar Pistorius, quien fue juzgado por la muerte de su pareja, mientras los titulares decían que lo hizo “Mató a su novia por error”. El atleta fue condenado a 15 años de cárcel y alegó haber confundido a su novia con un ladrón y le disparó 4 veces.
“Eso es la disminución de la gravedad del tema, la banalización de acontecimientos como la muerte, la violación de una persona, son delitos con una responsabilidad”, sostuvo.
Además, Chavero calificó como un error cuando se habla en los medios de violencia doméstica, al indicar que no es un asunto privado sino una cuestión social y del Estado cuando se sobrepasan las fronteras del respeto y se comete un delito.
La docente expresó que los medios pueden contribuir a que la sociedad comprenda de forma distinta los hechos de violencia de género, capacitándose para ejercer mejor su labor profesional.
La ciudadana María Ayala dijo a Andes que en ocasiones se muestran demasiados estereotipos en relación con las mujeres en los medios de comunicación, y suelen señalarlas como culpables por lo que le ocurrió. “Hablan de cosas banales, por ejemplo, de cómo estaba vestida, si estaba sola, eso no es importante”, ejemplificó.
Además, dijo que los medios no toman con seriedad el hecho de que se ha acabado con una vida, la vida de una mujer y no analizan a profundidad el entorno en el cual vivían, por lo que tiene el criterio de que los medios pueden contribuir a generar conciencia sobre la prevención de los hechos de violencia de género.
Las consideraciones de los expertos coinciden con una cruzada nacional impulsada desde el gobierno nacional para poner fin a la violencia contra la mujer que cristalizó con la aprobación el pasado día 25 de una ley en la Asamblea Nacional.
Según estadísticas oficiales, en Ecuador al menos 6 de cada 10 mujeres han sido víctimas de la violencia. (ANDES/LA NACIÓN)