Té negro para bajar de peso, ¿cuánto tomar?
El té negro es una de las infusiones más consumidas en el mundo, a cualquier hora del día. Esto no se debe solamente a que, a diferencia de otras variantes como el té verde, mantiene su sabor durante años, sino a que sería capaz de proporcionar muchos beneficios para la salud. Entre ellos se destaca la capacidad de ayudar a controlar o perder peso.
El té negro es una bebida que se obtiene de las hojas de la planta Camellia sinensis. Estas se utilizan para producir diversas variedades, incluyendo el té verde, el oolong o el blanco. El negro se distingue de los demás porque se somete a un proceso de oxidación completo, que le garantiza un color y sabor único.
Su popularidad e incidencia en la dieta a lo largo del mundo, llevó a que muchos expertos comenzarán a estudiar sus efectos sobre el cuerpo. Distintas investigaciones coincidieron en que su consumo se asocia a una mejor distribución de la grasa, así como a una reducción significativa de la circunferencia de la cintura. Esto podría deberse a los siguientes efectos sobre el organismo:
Estimulación metabólica
El té negro suele tener una mayor concentración de cafeína que sus pares. Esta actúa elevando la temperatura corporal en un proceso conocido como termogénesis, que desencadena reacciones en el cuerpo humano que resultan en la quema de grasa y en un mejor metabolismo de los nutrientes. Esto se traduce en una importante ayuda para que el cuerpo funcione mejor durante el ejercicio y logre perder peso más rápido.
Salud de las bacterias
La microbiota intestinal hace referencia a los microorganismo que viven en nuestro intestino. Estos han sido estudiados durante años por sus efectos sobre diferentes procesos físicos y químicos que ocurren en el cuerpo.
Por ejemplo, un estudio en animales publicado en European Journal of Nutrition, mostró que tanto el té negro como el verde cambiaron la proporción de bacterias intestinales. El porcentaje de bacterias asociadas con la obesidad disminuyó, mientras que las bacterias asociadas con la masa corporal magra aumentaron.
«Se sabía que los polifenoles del té verde son más eficaces y ofrecen más beneficios para la salud que los polifenoles del té negro, ya que los químicos del té verde se absorben en la sangre y el tejido. Nuestros hallazgos sugieren que el té negro, a través de un mecanismo específico del microbioma intestinal, también puede contribuir a la buena salud y pérdida de peso en los seres humanos», dijo Susanne Henning, una de las autoras del estudio.
Ingesta calórica
Naturalmente, el té negro es una bebida libre de calorías (1 caloría cada 100 gramos), por lo que muchos investigadores estudiaron como esto podría ayudar a controlar o perder peso. Según los expertos, beber esta infusión durante o antes de una comida puede estimular la sensación de saciedad, evitando comer de más o los populares «atracones». A la vez, permite evitar otras opciones que no son saludables, como los jugos de frutas artificiales o bebidas azucaradas.
Otros beneficios
El proceso de oxidación consigue que el té negro contenga más cafeína que sus variantes (entre 2 y 4%). Además, esta infusión es rica en antioxidantes, como polifenoles y catequinas, y en dos compuestos saludables: teaflavinas y tearubiginas.
Consumiéndolo regularmente, además de mejorar el control sobre el peso, también puedes aumentar el estado de alerta, atención y rendimiento, desarrollar mayor densidad ósea, incrementar la humedad, brillo y fortaleza de la piel, equilibrar la microbiota intestinal, cuidar la salud bucal, y combatir el endurecimiento de las arterias.
Precauciones
La ingesta moderada de té negro es segura para la mayoría de los adultos. Sin embargo, cuando es elevada (más de cinco tazas diarias), puede causar efectos secundarios debido a la cafeína. En esos casos se ha registrado cefalea, nerviosismo, problemas para dormir, vómitos, diarrea, irritabilidad, frecuencia cardíaca irregular, temblores, acidez, mareos, zumbido en los oídos, convulsiones y confusión.
Para potenciar sus beneficios sobre el peso corporal, combina un consumo moderado de té negro con una dieta saludable, equilibrada y sostenible, junto a rutinas o programas de ejercicio regular. Recuerda, el té negro es un gran complemento de la alimentación, pero no debe ser el centro de esta.
Fuentes consultadas: American Botanical Council, Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Departamento de Agricultura de EE. UU., Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.