Antonio Aguirre

Se le durmió el diablo al Mashi, cuando en forma inesperada se lo ocurrió la magnífica idea, para sanidad del país, de su retorno apresurado para tratar de recuperarse del descalabro que se le venía y que exactamente es por generosidad de su perturbada mente sufrir en carne propia, como lo que dice Carlos Gardel cuando canta el tango – Cuesta Abajo – del que cito a solo tres pequeñas estrofas: Si arrastre por este mundo la vergüenza de haber sido y el dolor de ya no ser… / la segunda :/ Ahora, cuesta abajo en mi rodada, las ilusiones pasadas ya no las puedo arrancar/ y la tercera: / Sueño con el pasado que añoro, el tiempo viejo que lloro y que nunca volverá, este tango y su himno – Cambalache – lo tendría que cantar a dúo con su compañerita Revolucionaria e histriónica la tristemente célebre Cristina Fernández de Kirchner condecorada por su Asamblea sumisa y ovejuna representada por una catadora de excreciones.

Vino por la lana de su ovejas y salió trasquilado, en su confusión mental se le podría estar pasando por su cerebro maléfico retornar a su Atico Belga y que sus amigos empiecen a pasar el sombrero para que le vuelvan a pagar el charter de su vuelo de regreso, por qué si se le ocurre retirarse como la última vez que abandonó el país recibirá el más sonado rechazó que la historia recuerde.

¡ Prohibido olvidar ! la experiencia de los refranes que nunca se equivocan como los que dicen: NO HAY PEOR CUÑA QUE LA DEL MISMO PALO y CRÍA CUERVOS Y TE SACARAN LOS OJOS.

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