Coca Codo Sinclair, es la hidroeléctrica más grande de las ocho que construyó el gobierno anterior para el cambio de la matriz energética del país, con una inversión de $2.800 millones. La central fue inaugurada en 2016 y se han registrado algunos inconvenientes en las operaciones.

La Contraloría General del Estado realizó un examen especial a la construcción, fiscalización y administración de la hidroeléctrica, construida por la empresa china Sinohydro. La auditoría corresponde al período 2012- 2015.

El mes pasado el organismo de control ratificó la responsabilidad civil en contra de funcionarios de Coca Codo Sinclair, de la constructora, y también de la fiscalizadora. El monto de las glosas es de $112 millones.

En el informe de la Contraloría, para determinar las glosas, se mencionan irregularidades en:

– Suscripción de contratos complementarios.

– Fórmula de ajuste de precios.

– Pérdidas por retraso en la generación de energía, entre otras inconsistencias.

Como responsables están tres exfuncionarios: dos exgerentes de Coca Codo Sinclair y un subgerente técnico administrador del contrato. El exvicepresidente, Jorge Glas, impulsó este proyecto y participó en la adjudicación del contrato cuando ocupaba el cargo de ministro de Sectores Estratégicos.

El estado aún no recibe la obra que era parte del cambio de matriz energética. En dos años se han evidenciado problemas en la obra civil, como microfisuras en la casa de máquinas.

VISTAZO