Opinión

Puigdemont, en prisiA?n

Diario El Tiempo de Colombia

El liderazgo independentista catalA?n es hoy una fotografA�a en prisiA?n, como lo resumiA? este diario en su ediciA?n de este lunes, luego de la detenciA?n en Alemania del expresidente del gobierno regional catalA?n Carles Puigdemont, una de las figuras mA?s representativas de aquel grupo que liderA? el procA�s y quien habA�a huido a BA�lgica desde octubre, tras proclamar una independencia que minutos despuA�s suspendiA?.

A A�l se le suman nombres como los de Oriol Junqueras, Jordi SA?nchez o Jordi Turull, quien poco despuA�s de fracasar en su primer intento por convertirse en presidente de la Generalitat, al no conseguir los votos necesarios, fue encarcelado, en una dinA?mica que, por apegada que parezca a la ley y al Estado de derecho, no debe hacer pensar que las cosas van por buen camino, pues son combustible para la hoguera de la fractura entre amplios sectores de la sociedad catalana y el resto de EspaA�a y, por quA� no, la de las vanidades de unos lA�deres que en su afA?n de pasar a la historia pretendieron torcer el pescuezo a la ConstituciA?n y a las instituciones. Otros optaron por la huida y hoy ven lo que sucede desde el exilio.

Las masivas protestas del domingo en Barcelona ante la noticia de la captura de Puigdemont dejan claro que el sentimiento independentista catalA?n va mA?s allA? de sus lA�deres, pero por lo mismo deben ser un llamado de atenciA?n al gobierno del conservador Mariano Rajoy para que propicie un diA?logo constructivo y necesario en un momento histA?rico que requiere de firmeza, sA�, pero tambiA�n de una apertura y una generosidad que entiendan que la soluciA?n no pasa por la prisiA?n y que sobre el terreno hay sentimientos y realidades que no se pueden imponer a la brava.

Puigdemont pasarA? unos dA�as, o tal vez meses, en un centro detenciA?n alemA?n a la espera de que la justicia de este paA�s decida si procede la solicitud de extradiciA?n cursada por EspaA�a. Dicho esto, quizA?s ya es hora de un cambio de tercio en esta traumA?tica relaciA?n, uno en el que se escuche mA?s y se reaccione menos. La unidad de EspaA�a lo vale.

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