Internacional

En Puerto Rico, crisis humanitaria de grandes dimensiones

La Habana. Seis meses después del paso devastador de los huracanes Irma y María por el Caribe, Puerto Rico aún se encuentra sumida en una grave crisis humanitaria, sin esperanzas de que el gobierno de Estados Unidos actúe para revertir esa situación.

Ese es el parecer de la boricua Wilma Reverón, copresidente y secretaria de Relaciones Internacionales del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, quien expuso en La Habana la realidad actual de ese territorio insular.

Puerto Rico tiene desde 1952 el estatus de Estado Libre Asociado de los Estados Unidos, lo que se traduce como un territorio no incorporado de la nación norteña, con capacidad legal de autogobierno.

Desde el punto de vista humano, el pueblo puertorriqueño está pasando por una situación muy difícil. Tenemos una crisis humanitaria de grandes dimensiones, donde se ha afectado gravemente la condición social y económica de los ciudadanos, señaló Reverón en entrevista concedida a Prensa Latina.

La activista detalló que en su país, donde existían niveles de pobreza superiores al 45 por ciento, ahora se estima que este indicador puede llegar hasta el 60 por ciento: ‘ya estamos hablando de miseria. Existen familias que llevan seis meses sin energía eléctrica, y muchos de ellos también sin agua potable’, denunció.

Reverón divulgó igualmente que muchos de esos núcleos siguen sin tener acceso a la salud. Se han cerrado alrededor de 300 escuelas y se registra una emigración masiva de boricuas hacia Estados Unidos. ‘En la actualidad, unos cinco millones de puertorriqueños viven en el continente, y solo 3.5 millones se mantienen en su país de origen’, apuntó.

Es una situación muy dolorosa la que se vive día a día en la Isla. Pero por el otro lado, las personas han sacado una fuerza de resistencia y resiliencia increíbles, resaltó la dirigente.

En ese sentido argumentó que los pobladores han tomado en sus manos la recuperación del país con ingenio e inventiva para buscar soluciones a los problemas que están enfrentando. ‘Se han percatado de la necesidad de ser solidarios los unos con los otros’.

No se trata de ser caritativos -declaró-, sino que hay que ayudarnos como familia y levantar al territorio para que en algún momento pueda retomar una ruta de crecimiento económico que no hemos conocido en los últimos 10 años.

Reverón subrayó que el pueblo ha podido entender con esta situación que Estados Unidos no tiene ningún sentimiento positivo hacia Puerto Rico, pues la ayuda desde Washington ha llegado tarde, además de ser poca y mala.

Por solo poner un ejemplo: la ayuda alimentaria proveniente de la Agencia Federal para Manejo de Emergencias (FEMA) se basó en bolsas de dulces y confituras, en un país donde hay una alarmante prevalencia de diabetes e hipertensión arterial, argumentó.

La activista añadió que en medio de esa realidad el pueblo también se ha percatado de que a Estados Unidos no le interesa que Puerto Rico sea un Estado de la Unión: ‘No nos consideran sus iguales, y eso se demostró en las claras diferencias a la hora de enfrentar como gobierno federal los estragos de los huracanes en territorios norteamericanos como Florida o Texas’.

Para Washington los puertorriqueños son ciudadanos de segunda clase -prosiguió-. Estados Unidos no va a hacer nada por ayudar a un desarrollo sostenible, en beneficio de nuestro pueblo.

Al respecto, explicó que la Casa Blanca solo ha utilizado la crisis humanitaria para enriquecer a las compañías norteamericanas, pues no están contratando ni el talento ni los recursos locales para enfrentar dicho panorama.

Nos están incluso negando la ayuda económica por la cual los puertorriqueños hemos pagado durante años, mediante el seguro de FEMA, agregó.

Esa es nuestra realidad -dijo Reverón para concluir-, creo que la máxima expresión de todo lo que he denunciado se evidenció en las imágenes difundidas durante la visita del presidente Donald Trump a la Isla luego del azote de los fenómenos naturales.

‘El mandatario lanzó entre risas, y ante televisoras de todo el mundo, rollos de papel sanitario; ese es, aún, el gran chiste del momento’.

Estados Unidos logró que Puerto Rico saliera de la lista de la ONU de territorios sin autogobierno en 1953, cuando hizo creer al mundo que ese pueblo caribeño había alcanzado la autonomía.

Sin embargo, varios países del Sur -entre ellos Cuba, Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Ecuador y Siria- han logrado en el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas mantener el debate sobre la isla caribeña sometida a cinco siglos de colonialismo, los últimos 119 años bajo el dominio estadounidense.

De esa manera, el Comité ha adoptado 36 resoluciones que ratifican el derecho de Puerto Rico a la libre determinación y la independencia. (PL/LA NACIÓN)