PACTO BAJO LA MESA
Comandante Raúl Hidalgo Zambrano/Guayaquil
Es una frase compuesta por los siguientes términos: Pacto, es un acuerdo entre dos o más personas o grupos que se comprometen a cumplir obligadamente algo; Bajo, denota ocultamiento, disimulo o mezquindad y; Mesa, es un conjunto de personas reunidas por cualquier asunto. De estas definiciones se deduce la frase comúnmente usada “pacto bajo la mesa”, que está de boga en el ámbito político e incendia las redes sociales ciudadanas con informaciones sobre acciones que están ocurriendo en favor de personas juzgadas por asaltar los fondos públicos, relacionados con el exgobierno de la “revolución ciudadana”.
Se dice que los pactantes o partes que dan y reciben favores son: el gobernante, su ministra de la política y algunos asambleístas de su partido político, CREO; los(as) asambleítas de UNES; y ciertos asambleístas de otros movimientos políticos. Lo que ratifica que existe el pacto oculto son los hechos públicos que salen a la luz y saldrán.
El general, estratega y filosofo chino Sun Tzu, dijo que “El arte de la guerra se basa en el engaño al enemigo”, no a los tuyos o gobernados; ojalá los aprendices a estrategas políticos del arte del engaño se den cuenta a tiempo y renuncien a cualquier pacto con los políticos que vendieron y saquearon la Patria, engañando al son permanente de la letra y música del Himno “Patria tierra sagrada de honor e hidalguía que fecundo la sangre (…)”.
La Asamblea Nacional, debe auto depurarse, poque es el campo de batalla para las componendas de toda laya; le viene bien recordar a la Asamblea Nacional Constituyente francesa, que, en 1789, aprobó “La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano”, documento de 17 artículos universales, fundamentos de la Revolución francesa (1789-1799). El artículo 2 dice “La finalidad de toda asociación política es la conservación de los derechos naturales e imprescriptibles del hombre. Esos derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión”; o sea, cualquier asociación o acuerdo debe ser transparente, encima de la mesa y no ruin debajo de ella.
Los pactos políticos deben existir entre cualquier actor o movimiento político para gobernar un pueblo, pero, debe ser sin ocultamiento, sin disimulo, sin mezquindad, sin favorecer la impunidad, claramente enunciado y publicado a la luz del día, para que todos seamos testigos de las obligaciones políticas acordadas para gobernar, así se minimizará los bajos pensamientos y los seudónimos.
Si esto sucede, la mesa volverá a ser un elemento útil, definida como un tablero plano, sostenida por varias patas, con la altura adecuada para mirarse a los ojos, alrededor de la cual se reúnan políticos o ciudadanos, para expresar con transparencia sus deseos o intereses. Y, bajo, será definido solo para la estatura física o espacio debajo del tablero.
Nosotros los gobernados, debemos estar atentos a los acontecimientos e identificar correctamente cualquier “pacto bajo la mesa”, para rechazarlo con firmeza; no debemos permitir que se otorgue una “patente de corso”, con el cuento de generar recursos económicos para el país.