Opinión

Murales buscan que mexicanos reflexionen

@Efe

Un águila devorada por miles de serpientes o una bandera de México hecha de verde dólar, blanco droga y rojo sangre son algunas de las imágenes que decorarán edificios de la capital mexicana, como parte de una propuesta artística que busca sacar a la calle los problemas del país.

El águila va a pintarse sobre un edificio de la transitada calle de Patriotismo y es idea de un artista mexicano, Ciler, quien se ha sumado a la propuesta ManifiestoMx, que intenta acercar los problemas a los ciudadanos para hacerlos reflexionar.

Habla de «la hipocresía sobre nuestros símbolos patrios» y es «una reconstrucción de nuestro escudo nacional ocupando las águilas y las serpientes, pero con una vuelta acerca de lo que está pasando, de cómo sería nuestro verdadero escudo nacional», explicó

Impulsado por la galería mexicana Fifty24Mx, ManifiestoMx es una iniciativa que reúne a una decena de artistas internacionales para expresar, a través de murales en espacios públicos, su opinión sobre la situación actual en México.

La bandera tricolor ya luce sobre un edificio cercano a la turística Plaza de Garibaldi, popular porque allí se reúnen cada día decenas de mariachis que ofrecen sus servicios, y es idea del italiano Blu, uno de los artistas de calle más prestigiosos del mundo.

Aunque desde lejos parece la bandera nacional, de cerca sus tres colores se convierten en las problemáticas de México: el rojo de la sangre de los muertos que causa el blanco de la droga, alentado por el verde, los dólares estadounidenses del mayor consumidor del mundo.

Y todo ello rodeado de soldados que parecen de verdad, pero al verlos bien se aprecia que son soldaditos de juguete.

«La idea es empujar a la reflexión, a la discusión, mover el tapete, que la gente piense y analice. Lo que no nos gusta mucho es que las cosas se queden estáticas. Es uno de los objetivos, que haya movimiento», dijo a Efe Arturo Mizrahi, uno de los organizadores de esta iniciativa.

Por ello se buscó que los lienzos fueran espacios «lo suficientemente grandes e impactantes para que la mayor parte de la gente los pueda ver» y están en la zona céntrica de la Ciudad de México, en colonias como Roma, Condesa, Guerrero y Centro Histórico.

El proyecto, realizado con donaciones en especie de personas, empresas, el grupo #YaMeCansé y el Gobierno de la ciudad, arrancó el 10 de febrero y se prevé que todas las intervenciones estén terminadas para el 14 de marzo.

El tema a desarrollar fue libre para los artistas y, aunque no han recibido ningún tipo de presión, sí tuvieron problemas con una pintura que no agradó a los vecinos.

Se trata de la pintura del italiano Ericailcane, en la que se representa a un mono con la banda presidencial, algo que molestó a la comunidad de vecinos del edificio donde se hizo la intervención. Ante esto, el artista se vio obligado a pintar la banda de negro.

En opinión de Ciller, participar en esta iniciativa supone «poder reflejar lo que está pasando en México hacia los ojos de otros países», que la visión de los artistas llegue al mayor número de gente posible.

«La idea es llegarle a un público que no necesariamente tenga que entrar en un espacio cerrado como museo o galería y reencontrarse en la urbe con este arte en la calle y que lo puedas ver cada vez que pases», explicó.

Que a los ciudadanos no se les olvide lo que está sucediendo porque «el mexicano es, por lo general, bastante olvidadizo».

Como hicieron los muralistas de los cincuenta y sesenta, ahora les toca a ellos «seguir hablado de lo que está pasando», apuntó.

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