El milagro del barrendero Ivanisevic sobre la hierba de Wimbledon
El croata, que había perdido las finales de 1992, 1994 y 1998, ganó la edición de 2001 cuando era el número 125 de la ATP y todo el mundo lo daba por muerto
“De niño siempre quise ser barrendero. No sé por qué, pero era mi sueño con 10 u 11 años” confesaba Goran Ivanisevic en 2010 en una entrevista a Mundo Deportivo. Por suerte el croata acabó siendo tenista, uno de los más carismáticos de finales del siglo XX y protagonista de una de las mayores hazañas de la historia reciente de Wimbledon.
Ivanisevic lo tenía todo para coronarse en la ‘catedral’ del tenis. Un servicio terrorífico y un juego en la red a prueba de ‘passings shots’ lo convertían año tras año en uno de los grandes favoritos, pero la realidad fue muy dura para él. Perdió tres finales en siete años: la de 1992 ante Andre Agassi, y las de 1994 y 1998 contra Pete Sampras, el todopoderoso rey de Wimbledon en aquella época que también le derrotó en las semifinales en 1995. (MUNDO DEPORTIVO/LA NACIÓN)