Confinado en su casa, junto a su familia, el defensa argentino de Emelec Leandro Vega contó, a diario Clarín de Argentina, estar atemorizado porque podría haberse contagiado con el nuevo coronavirus, pues el fisioterapeuta del equipo que le ayudaba –en su hogar- en la recuperación de una lesión dio positivo al COVID-19.

«Tenemos miedo, sí. Y me da más miedo porque estuve trabajando con un kinesiólogo que venía a casa a ayudarme con la recuperación de mi lesión y ahora está infectado. Hace una semana y media dejó de venir porque empezó con los síntomas y hace tres días le dio positivo el test. Entonces, uno no sabe cuándo puede llegar el virus. Da miedo», indicó el futbolista, este viernes 3 de abril, al medio bonaerense.

El profesional que trataba a Vega es Luis Zambrano, se informa. «Él ahora está en su casa porque no hay cama en los hospitales para que puedan internarlo. Hablé hace dos días con él y me dijo que estaba mejor, pero venía de un par de días complicados, le costaba respirar», explicó el exjugador de River Plate, Newell’s Old Boys y San Martín de San Juan.

«Estoy asustado porque él venía a casa y no sé si nos trasladó el virus o no. Nosotros por ahora no tenemos síntomas y tratamos de hacer las cosas bien, en cuanto a la higiene, a tomar las vitaminas correspondientes. La única que sale de casa es mi mujer pero de vez en cuando para comprar comida, yo mucho no puedo salir por la lesión y si necesito remedios les pedimos a los médicos del club y te los envían de alguna manera”, acotó el zaguero de 23 años.

La lesión por la que el kinesiólogo iba a la casa de Vega es en una de sus rodillas. “Me regeneraron cartílagos y menisco. Justo me operé cuando ya se sabía que el fútbol iba a parar. Y no me imaginé que iba a pasar todo lo que está pasando. Empecé a hacer la rehabilitación con él en mi casa, ahora seguiré como pueda”, relató Vega al diario argentino. (D)