Por Gerardo Maldonado Zeas/ Cuenca.

Al binomio Lasso – Borrero, les espera una tarea inmensa para recomponer al Ecuador; necesitarán de inicio, consolidar el plan de vacunación para los 9 o más millones de ecuatorianos, tarea impostergable que con inteligencia y decisión ya dio sus primeros pasos por el trabajo del vicepresidente Borrero, quien además tendrá en sus manos el mejoramiento del sistema de salud pública.

Deberán conseguir el apoyo de los otros partidos políticos de este atomizado mapa electoral con sus espacios en la Asamblea Nacional, para que los proyectos y cambios requeridos se puedan ejecutar.  Buscarán apalancarse en el brazo del sector privado, y tal como el presidente electo dijo en CNN, lograr el sinceramiento en el pago de impuestos de los empresarios, y sumar en la tarea para generar empleo, sin vulnerar los derechos adquiridos por los trabajadores. Aprovecharán esa reducción en el riesgo país de más de 300 puntos generada pocas horas después de su triunfo, para invitar a los inversionistas a ejecutar sus planes estancados por el miedo y la poca confianza en el futuro del país.

En estos 37 días restantes hasta su posesión, deberán buscar las mentes más lúcidas, para que conduzcan con conocimiento, sabiduría y liderazgo las áreas del siempre complicado aparato gubernamental. El respeto a la independencia de las demás funciones del Estado, sobre todo a la justicia, logrará que los fugados o quienes se han burlado de la sociedad, con sus cómplices y coautores, al sembrar la impunidad como práctica pública, paguen sus culpas.

A partir del próximo 24 de mayo, fecha esperada por algunos para iniciar su venganza, tal como ya dijo Iza y los voceros del ala dura del Araucismo desconsolada por la pérdida electoral quienes supuestamente se ponen a las órdenes del nuevo gobierno, cuando por detrás le fustigan, insultan y amenazan, los ecuatorianos no debemos permitir que el terror se apodere del ambiente si deseamos tener paz para empezar de nuevo, y caminar con tranquilidad, pues la tarea es harto difícil, pero tiene una luz al final del túnel.