Opinión

Instituciones buscan fomentar el cultivo de la Maracuyá

Luego de realizar el ‘Plan de Mejora Competitiva de Banano y de palma aceitera’, el gobierno impulsa ‘el Plan de Mejora Competitiva de Maracuyá’.

GUAYAQUIL. Con el afán de  fomentar el Plan de Mejora Competitiva de Maracuyá,  CORPEI junto con el  Ministerio de Comercio Exterior y el Ministerio de Agricultura, Acuacultura y Pesa (MAGAP), proporcionan talleres a pequeños y medianos productores de esta fruta de cultivo no tradicional.

Por medios de estos talleres estas instituciones, buscan apoyar el desarrollo del sector de maracuyá y es así que prevén realizar un diagnóstico de la cadena, un plan estratégico, trabajar una hoja de ruta y un acuerdo de voluntades de las partes, para lograr el fortalecimiento del sector y contribuya el Plan Nacional del Buen Vivir Rural.

Los cultivos de maracuyá representan una superficie de 28,747 hectáreas, en el Ecuador, distribuidas en 9,088 UPAS,  esto significa el 69% correspondiente a pequeños productores.

Este sector emplea de manera directa e indirecta a 600 mil personas.

Manabí, Esmeraldas, Guayas, El Oro y algunas zonas de Santo Domingo de los Tsáchilas, representan las principales zonas de cultivo de maracuyá.

En América del Sur, Ecuador es el principal productor de la fruta, como así también   exportador de la pulpa congelada.

Uno de los mayores desafíos que tienen los productores de maracuyá ecuatorianos es la apertura que el mercado europeo les ofrece “Es así que  tenemos que subrayar nuestras debilidades para saber lo que debemos mejorar para ser más competitivos y obtener éxitos en mercados internacionales”, acotó Eduardo Egas, Presidente Ejecutivo de Corpei.

“Es una cadena bastante interesante en el cambio de la matriz productiva y hay que aprovecharla”, resaltó Carol Chehab, subsecretaria de comercialización del Magap.

Por su parte, la subsecretaria de Comercio e Inversiones del Ministerio de Comercio Exterior,  Ma. Antonieta Reyes, afirmó que constantemente se realiza un trabajo en conjunto para buscar nichos de mercados, desarrollar la competitividad, incrementar el valor agregado y la diferencia del producto mediante estrategias como la elaboración de saborizantes especiales entre otras muy apetecidas en mercados asiáticos.

(VBF/La Nación)