Hacer ejercicio quizás no proteja de la depresión en la adolescencia
La investigación, contó con más de 700 adolescentes a los que dieron seguimiento desde noviembre del 2005 hasta enero del 2010.
REINO UNIDO. Aunque hace mucho se pensaba que hacer ejercicio ayuda a mejorar los síntomas de la depresión, quizás los adolescentes no obtengan estos beneficios, según un nuevo estudio británico.
El estudio halló que los niveles de actividad física en los primeros años de la adolescencia no parecieron afectar a las tasas de depresión en los últimos años de la adolescencia.
«Los participantes que eran más activos físicamente al principio de la adolescencia no mostraron síntomas de depresión significativamente menores (ni mayores) ni unas probabilidades significativamente diferentes de sufrir trastornos depresivos en los últimos años de la adolescencia», escribieron los autores del estudio.
Pero algunos expertos estadounidenses cuestionaron la validez de los hallazgos basándose en el diseño del estudio, e indicaron, por ejemplo, que los investigadores no delinearon el tipo de actividad realizada, o si se hizo voluntariamente o como parte de una clase de educación física.
Al principio del estudio, los investigadores midieron la actividad física entre semana y los fines de semana de los adolescentes, cuya edad promedio era de 14 años. También hicieron que los adolescentes rellenaran un formulario sobre los cambios de su estado de ánimo.
Los adolescentes realizaron un promedio de 53 minutos de actividad física de moderada a intensa cada día entre semana, y unos 32 minutos al día en los fines de semana, según el estudio.
Tres años más tarde, cuando los participantes tenían 17 años, los investigadores les pidieron que rellenaran el formulario sobre el estado de ánimo de nuevo. Los investigadores no encontraron ninguna conexión entre los niveles de actividad física a los 14 años de edad y la depresión a los 17 años de edad.
Nuestros hallazgos no eliminan la posibilidad de que la actividad física afecte de forma positiva al estado de ánimo depresivo en la población general, pero sugerimos que este efecto podría ser pequeño o inexistente durante la adolescencia. (Internet/La Nación)