Empeoran los vaticinios sobre crecimiento económico de la Eurozona
Bruselas, (Prensa Latina) Las malas noticias para el crecimiento de la Eurozona no cesan y cada vaticinio es peor que el anterior a juzgar por el análisis más reciente realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Casi la totalidad de los organismos han revisado a la baja el crecimiento de la Eurozona para este año y lo han situado en rangos entre el uno y el 1,6 por ciento al aludir al incremento de las tensiones comerciales, una menor expansión de la demanda de China, condiciones financieras más ajustadas e incertidumbres políticas.
Así, mientras la Comisión Europea estimó que este año la Zona del Euro crecería 1,3 por ciento, Oxford Economics lo estimó en 1,4 y el Fondo Monetario Internacional en 1,6.
Según la OCDE el comercio internacional pierde vigor debido a los conflictos arancelarios y repercute de manera adversa sobre la confianza de los inversores de todo el orbe.
‘El crecimiento del comercio se ha parado, lo que refleja una reducción de la demanda tanto externa como interna’, señaló el organismo.
Si bien durante la víspera hubo reportes que revelaron acerca de un repunte de las ventas minoristas y de una ligera recuperación de la confianza empresarial en febrero en relación a meses anteriores, la caída del sector industrial supone un golpe duro para la Eurozona.
De acuerdo con el índice PMI del sector manufacturero elaborado por la consultora IHS Markit, en febrero dicho ámbito decreció 1,2 puntos y se situó en los 49,3 puntos.
El indicador descendió por debajo del nivel de 50 puntos que refleja una contracción de la actividad por primera vez en cinco años y medio y lo más preocupante, según estimó la entidad, es que los pedidos están disminuyendo a un ritmo más rápido que la producción y a una velocidad no observada en los últimos siete años.
Con su registro más débil desde 2014, la Eurozona creció 1,4 por ciento al cierre del pasado año, seis décimas menos que en el periodo precedente y debido, en buena medida, al enlentecimiento del crecimiento alemán.
Datos de la Oficina Federal de Estadística de Alemania revelaron un crecimiento del 0 por ciento durante el último trimestre del 2018 en ese país debido a los problemas experimentados allí por la industria automotriz.
La OCDE, estimó asimismo que el porvenir no es halagüeño para el área de la moneda común sobre todo en lo que se refiere al proteccionismo comercial propugnado por Estados Unidos.
‘Los riesgos continuarán porque otras medidas restrictivas se podrían imponer en sectores muy sensibles al comercio como el automóvil y las piezas para vehículos, como muestran las negociaciones entre EE.UU. y la Unión Europea, alegó.
Esto golpearía especialmente a Europa, abundó el reporte, donde las exportaciones de vehículos representan una décima parte de todas las exportaciones a la nación norteña y donde existen importantes vínculos en las cadenas de suministros lo que expandiría el impacto a través de varios países y sectores.
Como parte de las recomendaciones que ofrece para revertir los riesgos, la OCDE propone la aplicación de políticas fiscales expansivas de forma temporal, el incremento de la inversión pública financiada con deuda en el entorno de un 0,5 por ciento del Producto Interno Bruto por año y abogó por una mayor liberalización de los mercados de bienes y de servicios.