Dieciséis días de paro afectan comercio en frontera norte
Son dos semanas de paralización y los camioneros agremiados en la Asociación de Transportadores de Carga, han expresado su preocupación por las pérdidas que ha dejado la protesta.
ECUADOR. Por vigésimo sexto día consecutivo se prolongó el paro en la ciudad de Ipiales en demanda de apoyo de las autoridades colombianas sobre sobre las bajas tarifas de los fletes, los precios de los combustibles y las rutas que van a los puertos.
Desde el mes anterior, el gremio de Transporte de Carga del vecino país que lidera la protesta, que afecta en la frontera con Ecuador, en especial Carchí. Aquí, cerca de 700 vehículos con destino al interior de Colombia, están represados en cinco almacenadoras de Ipiales a causa del paro.
Pese a que la medida es pacífica y consiste en la inmovilización de los automotores; los transportistas de Ecuador y Perú no pueden circular en territorio colombiano, debido a que en los últimos días, en ciudades como Bogotá, Cali, Medellín y Pasto ya se registraron disturbios en las vías.
Harold Delgado, presidente de la Cámara de Comercio de Ipiales, indicó al diario El Norte, que las actividades de importación y exportación han disminuido dejando pérdidas en Ipiales de mil millones de pesos diarios. “A la frontera nos afecta mucho más porque versamos nuestra economía en la transacción de importaciones y exportaciones”.
Según la Asociación Nacional de Empresas Transportadoras de Carga por Carretera (Asecarga), las pérdidas se estiman en 87.165 millones de pesos a la fecha, por concepto de fletes, peajes, consumo de combustible, actividades conexas como servicios en montallantas, parqueaderos, mano de obra, restaurantes, entre otros
Para Edison Galvis, administrador de la Almacenera La Frontera, indicó que, en el lugar, de momento están 150 vehículos de carga pesada ecuatoriana y peruana. “Ante la inseguridad que significa circular por las vías, la carga está represada aquí”, dijo, e indicó que mucha de esta es perecible como cebolla y pescado que pese a estar refrigerado, mientras más pasa el tiempo tiende a descomponerse. Los vehículos pesados de Ecuador vienen desde Quito y la Costa en su mayoría con destino a Bogotá.
Y es que la manifestación se ha desarrollado a través de la suspensión de actividades, concentraciones y caravanas principalmente en los departamentos de Antioquia, Caldas, Nariño, Casanare y Arauca. En Valle, Risaralda y Putumayo, también se han realizado actividades esporádicas.
Mientras que Diego Navarrete, transportista ecuatoriano, indició que el temor se apodera por posible ataque y daños a sus unidades, limitando la mercancía. “Tenemos que esperar que se acabe el paro para ir”.
Con esta movilización los colombianos buscan presionar al Ministerio de Transporte de ese país para que se adopten medidas que beneficien a los camioneros, pues según lo manifiestan, son varios los incumplimientos sobre acuerdos anteriormente pactados. (DO/La Nación)