Barcelona entrena a puerta cerrada
El Clásico del Astillero despierta pasiones en todo el país a pesar de que actualmente toreros y eléctricos viven diferentes situaciones.
GUAYAQUIL. El Puerto Principal se alista para vivir un nuevo Clásico del Astillero: el primero del año dentro del campeonato ecuatoriano de fútbol, que se cumplirá este domingo (17h35) en el estadio Modelo Alberto Spencer.
Antes de ese juego Emelec y Barcelona vienen de ceder puntos en Copa Libertadores. Los toreros cayeron el martes ante el Libertad, y los azules como visitante ante Independiente de Porto Alegre.
Para este parte, Rubén Israel realizará algunos cambios en su alineación para enfrentar a Emelec, que quiere lograr un triunfo como despedida de su técnico, Gustavo Quinteros, quien dirigirá su último partido al mando de los azules.
Por eso, el momento previo al cotejo 208 fue ayer distinto. Mientras en el Monumental Israel mostró las debilidades y fortalezas de los toreros, en la otra orilla, en Los Samanes, su colega eléctrico, Quinteros realizó una jornada recreativa luego del viaje que realizaron desde Brasil y concentró al equipo hasta el domingo.
Pero no será un partido más para Barcelona. Así lo dio a entender el entrenador torero, quien no desea tener más presión y decidido que el equipo entrene hasta el sábado, día que se concentrará, a puerta cerrada.
Y tiene razón. Desde que inició el torneo nacional, los toreros no solo han ganado un partido y han dejado una pésima impresión, por lo que el domingo buscarán reivindicarse ante su tradicional rival y volver a la senda del triunfo por lo que dijo que “el equipo se comprometió a jugar mejor y que se obtendrán mejores resultados”.
Pese a ello, el adiestrador resaltó que se están preparando con normalidad y optimismo en el transcurso de lo que queda de la semana.
Pero el panorama no es de todo alentador. El uruguayo tendrá que solucionar nuevamente la ausencia de Matías Oyola, así como Federico Nieto. (DO/La Nación)