«Qué es más duro, el golpe a la vida o el golpe al bolsillo», se preguntó la alcaldesa Cynthia Viteri, a propósito de mantener cerrada las playas, bajo jurisdicción de Guayaquil, durante el feriado último. «Tenemos que acostumbrarnos que la vida cambió y cambió para siempre», con la pandemia provocada por el SARS-CoV-2.

«Vamos ir abriendo la ciudad poco a poco», par que se puedan recuperar la dinamia económica y el empleo, apostilló.

El semáforo en amarillo continúa, vamos a seguir tomando medidas que puedan evitar contagios. En caso de que veamos que los casos de contagios aumentan se tomarán acciones al respecto.

Viteri comentó que hasta el momento, en Guayaquil, 450.000 personas han sido sometidas al triaje. Se puede concluir -dijo- que lo que se ha encontrado es 13 casos por cada 10.000 habitantes, la semana pasada bajo un poco, pero esta data es muy dinámica, cada día varía. «Llevamos 65 días intercalados, desde el 10 de mayo, que fue el primer día de cero muertes asociadas al covid-19, por encima del promedio diario (37 fallecimientos)». (jtr)

 

 

 

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